DESDE VAL: LAS BODAS REALES NO SIEMPRE SON PARA SIEMPRE

LAS BODAS REALES NO SIEMPRE SON PARA SIEMPRE

9:00 | Author: AMCYL

Creo que muchos de nosotros recordaremos la boda de la Infanta Elena con Jaime de Marichalar. Era como las de cuentos de hadas, pero en España, en este caso, en Sevilla, en 1995, hace casi 15 años.

Fue en marzo en un día especialmente bonito, con sol, con muchos colores, muchas sonrisas, muchos invitados.

Hace ya casi dos años que la Infanta y el Duque de Lugo se separaron y el divorcio se hizo oficial hace apenas un mes.

Después de la boda, el Duque de Lugo fue "inmortalizado" en una figura que el Museo de Cera de Madrid colocó en la sala donde estaban los otros miembros de la familia real. Hasta allí, todo muy bien. Cuando ibas al museo veías al rey, a la reina, al príncipe, a las infantas y al Duque de Lugo y luego, a los nuevos miembros de la familia. Pero, cuando se separaron, al Duque lo llevaron a la sala taurina, donde desde un burladero veía a los toreros. Y ahora que ya no es consorte, pues, se lo han llevado al almacén.

No ha quedado muy claro quienes más están en el almacén aunque seguramente serán algunas de las más famosas celebridades españolas e internacionales que han dejado de serlo. ¡Y con lo caro que sale hacer estas figuras!

Supongo que se guardan en una especie de "stand-by" por si acaso vuelven a ser celebridades por cualquier razón y tienen que volver al "candelabro" de las salas principales del museo. Nadie ha confirmado cuánto dura esta estancia a la espera de la vuelta a la fama, aunque se supone que si los personajes no vuelven a ser famosos, las figuras se derriten y la cera se vuelve a utilizar para confeccionar nuevas celebridades. No debe sentar nada bien enterarte que tu figura de cera ya no está en exposición y, menos aún, que te han llevado al almacén y todavía menos, que te han derretido.

Me parece que si se retira una figura de un personaje, debería hacerse con mucha más discreción de la mostrada en este caso; tampoco me parece que se deba borrar de esta manera de la memoria a una persona que, al final de cuentas, ha jugado un papel en la historia de la familia real española. Después de todo, es el padre de los nietos mayores del rey y ha sido una influencia notable en la Infanta.