21:09 | Author: AMCYL

No sé si os habéis fijado pero conforme empieza el mes de diciembre, la televisión se puebla con una gran cantidad de mensajes con hermosas mujeres que vagan perdidas por mansiones y palacios o arrogantes hombres que se tiran al mar desde acantilados o cruzan bosques y desiertos más frescos que un pingüino en un estanque helado. A la vez que nos deleitan con estas imágenes, voces desganadas nos avisan que para poder parecernos a estas personas tenemos que usar "Eau de Rien" (pronunciado:"odegrain", más o menos) o "Herminia Carrera for Men" (pronunciado "JermainaCarreraformn", más o menos).

Claro está, la idea es que salgamos corriendo de casa, luchemos contra la lluvia y la nieve y lleguemos a la perfumería más cercana (en Valladolid es fácil porque hay muchas) y compremos el preciado líquido a precio de oro para regalárselo a nuestros seres queridos estas navidades.
Pues va a ser que no. Hace mucho frío, los perfumes en cuestión están muy caros y luego ni huelen como dicen que huelen y cuando te los eches, aunque te bañes en ellos, no te conviertes en el arrogante hombre que se tira al mar desde el acantilado, ni nada parecido. Y digo yo, ¿para que se echa el perfume si luego se va a tirar al mar?
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